viernes, 25 de octubre de 2013

I UNIDAD: Introduccion al Estudio de la Historia

I UNIDAD: Introduccion al Estudio de la Historia

Una de las cosas que se ha discutido, se discute y se discutirá es qué es la historia. Como en otras ciencias, en cada época ha habido escuelas diferentes. Pero desde los primeros historiadores griegos, como Herodoto, nos ha distinguido la curiosidad por saber que había pasado antes de nosotros. También algunos pensadores como Francis Fukullama han determinado el fin de la historia.
Es difícil separar lo que es la historia como objeto de estudio y como ciencia que estudia algo, pero vamos a intentarlo. En el siguiente apartado veremos que es la historia como ciencia, pero de momento vamos a intentar dar una definición de lo que es.

Podríamos decir que es el conjunto de hechos protagonizados por el hombre en el pasado. Como veréis, no es simplemente el conjunto de hechos del pasado, pues esto incluiría todo lo ocurrido en el planeta desde su origen. La historia tiene como protagonista fundamental al hombre.

Antes del siglo XIX

La historia antes del siglo XIX tenía un carácter moralizador, ejemplificador, con la finalidad de perpetuar en la memoria los grandes personajes y los grandes acontecimientos. Durante siglos se pensó que los contenidos que se habían de recordar eran los hechos de los Estados y las civilizaciones más importantes, la vida y la obra de los reyes y gobernantes, las guerras y los tratados, las instituciones y las luchas por el poder.

La Historia se escribía a través de buenos relatos en los que se afirmaba que la Historia nacía y se hacía gracias a las ideas de los grandes personajes. La erudición y el relato literario caracterizaban una Historia que no tenía, por tanto, rigor intelectual. Esta concepción de la Historia experimentó un cambio notable a partir del período de la Ilustración.

Inicios del siglo XIX

A comienzos del siglo XIX la Historia tuvo mucha aceptación como disciplina a la vez que se ponían en marcha los métodos que permitían poner en marcha las investigaciones históricas: La arqueología, la filología, la egiptología y las primeras campañas de excavaciones. Al mismo tiempo se inició la publicación de recopilaciones de fuentes históricas y aparecieron las primeras grandes obras históricas. Los principales historiadores fueron T. Macaulauy y J. Michelet. Pero la organización histórica desde las universidades hizo que adquiriera un sentido diferente. En el marco universitario la Historia se pasó a llamar ciencia histórica. Esto representaba la separación definitiva entre el discurso científico y el meramente literario.

El positivismo

Esta corriente de pensamiento difundió la creencia de que la Historia podía desarrollarse como cualquiera de las otras ciencias. Los historiadores más importantes de esta tendencia historiográfica fueron A. Compte y L. von Ranke.
El positivismo pretendía llevar a cabo una investigación científica libre de especulaciones filosóficas y estudiar la Historia con una objetividad absoluta, reconstruir los hechos tal y como sucedieron. La historia positivista basó todos sus conocimientos en los documentos escritos, pero sólo recopilaba los datos y no ofrecía interpretaciones de los mismos.

El materialismo histórico

El materialismo histórico es una corriente filosófica e histórica que surgió a mediados del siglo XIX como crítica al capitalismo y a la sociedad burguesa en pleno proceso de industrialización. Su pensamiento y su lenguaje nuevo fueron verdaderamente revolucionarios y, aunque sus principios han perdido buena parte de su validez, muchos de sus análisis y de su vocabulario impregnan actualmente las ciencias sociales. K. Marx fue el primero en establecer diferentes modelos de sociedad para períodos históricos de larga duración y definió cada etapa de evolución histórica por su modo de producción.

El materialismo histórico fue el precursor de la historia social y económica, considerando que la lucha de clases era el motor de la Historia.Quizás la mejor manera de comprender la propuesta del Toynbee sería decir que en ella se hace explícita una Filosofía de la Historia, esto es, se presenta una visión sistemática y unificadora de la historia de la humanidad, comprendida en el estudio de sus diversas civilizaciones.

Dentro de este contexto, la primera idea relevante para comprender esta propuesta, es su reflexión crítica a la historiografía tradicional, que hace del "Estado Nacional" la unidad de análisis y reconstrucción histórica básica. Según el autor, ninguna historia nacional se comprende sin atender a las relaciones que se establecen con otras naciones y al contexto general que las incluye. Siguiendo este razonamiento, Toynbee propone que las verdaderas unidades, los "campos inteligibles de estudio histórico", son las civilizaciones. Estas las concibe, en última instancia, como unidades culturales que incluyen variados pueblos y/o naciones dentro de un mismo conjunto de creencias básicas.


El mundo occidental está condicionado por dos fuerzas distintas, la democracia (política) y el industrialismo (económica), que han creado un determinado modo de pensar la Historia, en torno a la idea de estados nacionales. Sin embargo, los estados nacionales no son entes inteligibles y autosuficientes de estudio, por lo que debe ampliarse el marco de observación hasta lacivilización. La civilización occidental como campo de estudio puede remontarse en un espacio determinado. También en un tiempo determinado, hasta el origen de la Edad Media, en donde es posible reconocer su encuentro con otra civilización distinta, a la que denomina Helénica, y que cobra forma en el Imperio romano. Siguiendo operaciones similares, llega a determinar la existencia de 21 civilizaciones, más un grupo de otras que han sido abortadas o detenidas.

I.I Importancia de la Historia

I.I Importancia de la Historia

La historia es una ciencia social cuyo campo de estudio es el pasado de los seres humanos. Pero no todo el pasado es conocido y estudiado; los historiadores han seleccionado hechos que, por diversas razones, son considerados importantes y dignos de ser conocidos como hechos historicos. Los investigadores han organizado y sistematizado dichos conocimientos en forma cronologica, con el fin de ordenarlos. Estos conocimientos son los que se estudian en este curso de historia universal.
Siempre que nos ponemos a estudiar la historia nos fijamos en los hechos acontecidos en el pasado, los personajes históricos importantes, los pueblos o civilizaciones que tuvieron importancia en algún tiempo remoto, los movimientos o modas que marcaron una época…etc.

La historia nos ayuda a entender el presente estudiando el pasado, la importancia de la historia reside en el hecho de que un pueblo que no recuerda su historia, corre el riesgo de repetirla. Las cosas hoy en día son como son gracias a la historia pasada. Nunca está de mas conocer el pasado de un pueblo o el pasado de nuestra raza humana.

Resulta también de máxima importancia conocer la historia mundial de modo que podamos enseñar a los que no saben qué es lo que pasa o ha pasado en el mundo. Quizás en otras materias sea mas necesario entrar en detalles y profundizar en conocimientos concretos, pero en el marco histórico, basta con saber unos pocos datos para estar informado. La historia es como una cebolla. Conviene conocer las capas externas que nos hablan de forma global de lo que ocurrió, y a medida que profundizamos y vamos conociendo más vamos pelando el resto de capas. La historia puede conocerse por encima o en profundidad.

Al aprender historia, uno capta conceptos e ideas básicas para entender las relaciones humanas, como se desarrolla en la naturaleza y como se relaciona el ser humano entre si. Basta mirar hacia atrás y ver que siempre ocurre lo mismo y que la historia se repite. Los conflictos son siempre iguales. El pueblo oprimido no puede más y crea una revolución que cambia un gobierno, luego pasa el tiempo y la historia vuelve a comenzar.

Podemos ver lo que ocurre en los países en guerra. Hoy en día hay guerras tan similares como las ocurridas hace miles de años. Las causas y los efectos son las mismas. La gente muere por sus ideales y por conseguir mejorar sus derechos, y eso ha sido siempre así y seguirá siendo así en el futuro.

Al comprender la historia podemos entender como es el mundo en este momento. Los acontecimientos del pasado dan forma a los países actuales, las guerras y las revoluciones han permitido que los países sean como son actualmente. Incluso los mapas cambian y las fronteras, antaño impasibles, se mueven al ritmo humano.

Estudiando la historia podemos comprender porqué África es un continente subdesarrollado, o porque la india se independizó de Inglaterra. También podemos comprender porqué los países luchan por territorios, como el caso de Palestina e Israel. Todos estos países forman hoy nuestro planeta pero han ido cambiando desde el principio de los tiempos. Los cambios son evidentes y nos ayudan a entender la posición actual en la que nos encontramos ahora.

La importancia de la historia reside en el hecho de que al entender lo sucedido en el pasado y la situación actual, podemos de mejor forma entender lo que está por venir y entender lo que debemos evitar y lo que podemos mejorar. Por último, queda hacer una reflexión. Quizás no sepamos mucho sobre la historia, no conozcamos los detalles, pero ahora, nosotros mismos estamos haciendo historia. Estamos viviendo en un periodo que en el futuro será recordado, que los niños estudiaran en los colegios, y todo eso depende de nosotros y todo ello lo hacemos nosotros.

Entendemos por historia a aquella ciencia cuyo objeto de estudio es el pasado de las sociedades humanas. La historia es considerada como una de las ciencias humanísticas que más utilidad le ha dado al ser humano no sólo para conocer el acervo cultural de las diferentes civilizaciones que han pasado por la historia si no también para permitirle construir su propia identidad, buscando y tomando datos de tiempos pasados que le faciliten más la elaboración de su propia idiosincrasia.

Para muchos, la historia tiene un rol fundamental como conjunto de conocimientos, legados, realidades históricas compleja del ser humano a lo largo del tiempo y a través de las regiones. Conocer no sólo la historia propia si no la historia de otras civilizaciones, culturas y sociedades (por más lejanas que puedan ser) contribuye a nuestro crecimiento como personas capaces de conocer, de comprender, de racionalizar la información y de tomar esos datos para seguir construyendo día a día una nueva realidad.

Para llevar a cabo cualquier estudio histórico es necesario realizar investigaciones o análisis de diferentes tipos de material: documentos escritos, trabajos ya publicados sobre diversos temas, fotos o imágenes, obras de arte, canciones o cuentos populares, etc. Todos estos elementos nos permiten construir diversos aspectos históricos de una sociedad como por ejemplo la vida cotidiana, el tipo de vestimenta, la alimentación, las tradiciones, las actividades económicas, el legado cultural de esa sociedad, los eventos históricos que sucedieron en una época determinada y el resultado que los mismos tuvieron en la conformación de esa sociedad, etc.

Hay diferentes formas de crear o de analizar la historia y eso dependerá obviamente de la ideología, la postura o el conocimiento que el historiador en cuestión tenga de manera previa. De cualquier manera, sea cual sea esa postura, toda forma de historia contribuirá para seguir construyendo el pasado y nuestra visión sobre el mismo de mil maneras diferentes pero igual de útiles e interesantes.

El estudio de la historia tiene dos aspectos prácticos:
1.    La importancia de su estudio.
2.    No existe pueblo sin historia.

Pues como ya les había comentado anteriormente la historia está ligada, al hombre así como al pasado presente y futuro y un pueblo sin historia no sería de este mundo porque aunque estuviera vacio tendría una historia de porque esta vacio.

Por lo mismo, la historia, estudia el actuar y comportamiento de aquellas sociedad antiguas. O personajes individuales, que han marcado un hito, en el desarrollo de la humanidad. 
Pero uno de los ejes fundamentales, en la importancia de la historia, es poder analizar el pasado, para comprender el presente. Para los historiadores, mirando el pasado, podemos comprender el por qué, de nuestra actualidad. Cómo hemos llegado a ser, lo que somos en la actualidad. E ahí, lo importante de la historia. Ya que al saber lo que ocurrió en el pasado, podemos aprender cómo mejorar el futuro. Sobre todo, sacar lecciones sobre los errores cometidos por nuestras sociedades. 
Ahora, se dice que la historia nace, por medio de la escritura (enfoque clásico). Ya que es a través de la escritura, que podemos dejar de manera fidedigna, encapsulado un momento de vida. Los primeros historiadores, fueron aquellos que iban relatando los devenires de su época. Sobre todo en las guerras, en las cuales, muchas veces, actuaban como biógrafos de alguno de los contendores. Por lo mismo, es que no son pocos, los pueblos, que han visto acortada su historia o se sabe muy poco de su existencia, ya que no poseían el conocimiento de la escritura. Por lo tanto, lo que se puede llegar a saber de ellos, es por medio de la arqueología y otras disciplinan, que indagan en aquellas sociedades perdidas, en la historia. Incluso, el uso de estas otras disciplinas, ha dado pie a nuevos enfoques de mirar la historia. La cual puede ser analizada o buscada, por medio de un enfoque multidisciplinario. Todo lo contrario del enfoque clásico.
La importancia de la historia, es que por medio de ella, podemos no sólo comprender el presente, sino que mejorar nuestro futuro. El hombre es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra. La historia muchas veces, busca evitar aquello. 
La Honduras Pre-colombina fue poblada por una mezcla compleja de pueblos indígenas representando una amplia variedad de orígenes culturales y lingüísticos. Entre estos grupos se destacan los mayas, los cuales estaban relacionados con los mayas de Yucatán y Guatemala. Los mayas se extendieron a través del valle del Río Motagua, centrando su control en el principal centro ceremonial de Copán, cerca de la actual ciudad de Santa Rosa de Copán. Por tres siglos y medio, los mayas desarrollaron la ciudad, convirtiéndolo en uno de los principales centros de su cultura. Causas desconocidas hasta hoy, provocaron el abandono y la destrucción de Copán y otras ciudades mayas, que en la época de la conquista española ya no eran más que ruinas.
Contactos españoles con la población indígena de Honduras comenzó con el último viaje de Cristóbal Colón. En 1502, Colón navegó más allá de la Islas de la Bahía y poco después siguió a Punta Caxinas (Cabo de Honduras), desembarcó en Trujillo y tomó posesión de Honduras en nombre de los soberanos de España. Desde su descubrimiento, el territorio de Honduras se mantuvo intacto, hasta marzo de 1524, cuando Gil González Dávila se convirtió en el primer español en arribar a Honduras con propósitos de conquista. Posteriormente lo hicieron, Cristóbal de Olid, Francisco de las Casas, Hernán Cortés y Pedro de Alvarado.
Una vez que Honduras se declaró independiente de las demás naciones de Centroamérica, se procedió a la organización del nuevo estado hondureño. Sin embargo, esta organización se vio obstaculizada por las rivalidades entre liberales y conservadores, que produjeron el caos político y retrasaron el desarrollo del país. La agitación política del país, atrajo las ambiciones de individuos y de naciones Centroamericanas y Europeas. Por todo el resto del siglo, los vecinos de Honduras constantemente interfirieron en su política interna. Luego de muchísimos inconvenientes, le tocó a la administración del doctor Marco Aurelio Soto, organizar el país, poniendo en marcha códigos modernos en materia civil, penal, de procedimientos, comercio y agricultura con el propósito de modernizar a Honduras y terminar de con la arcaica legislación colonial.
La economía de Honduras basada en la agricultura, fue dominada en el siglo XX por empresas estadounidenses como la, United Fruit Company, la Standard Fruit Company y la Cuyamel Fruit Company, las cuales establecieron enormes plantaciones de banano a lo largo de la costa norte. Estas compañías, hicieron rápidamente del banano, la principal exportación Honduras a cambio de grandes concesiones. De esta forma, el capital extranjero, la vida en las plantaciones de banano, y los conservadores, fueron factores determinantes en la política de Honduras desde finales del siglo XIX hasta mediados del siglo XX.
Estas culturas alcanzaron grandes progresos en los diversos campos del conocimiento humano, impulsados por el desarrollo de una variada agricultura (frijol, cacao, chile, etc.) y contaban con grandes sistemas de riego. De esta manera garantizaban una alimentación adecuada para sus numerosas poblaciones. Además aplicaron técnicas de gran perfección en los tejidos y la cerámica. Desarrollaron un intenso y variado comercio. Alcanzaron un alto desarrollo científico en las matemáticas y la astronomía; además de la arquitectura y la escultura, que emplearon en la construcción de grandes ciudades.
En la sección nor-occidental de Honduras, predominaban los pueblos con influencia tolteca, como los náhuatl, que habitaban en el valle de Naco y Trujillo; los chortis grupo mayance localizado en Cortés, Copán y Ocotepeque y los lencas, que se extendían por los departamentos de Santa Bárbara, Lempira, Intibucá, La Paz, Comayagua, Francisco Morazán y Valle y parte de lo que hoy comprende el territorio de El Salvador.
El resto del territorio hondureño estaba habitado por pueblos provenientes del sur del continente, con una cultura nómada y semi-nómada, regidos por relaciones de producción comunal primitivas. Entre estos pueblos se encontraban xicaques, pechs tawahkas y misquitos que, en su conjunto, formaban la mayoría de la población del país.Fue hasta después de la segunda mitad de 1700 que se conformaron otros grupos étnicos, a lo largo de la zona costera del litoral Caribe: los garífunas y los negros de habla inglesa.
La población más numerosa la constituían los lencas quienes, al momento de la llegada de los españoles, era el más extendido y organizado de los grupos del país...habitaban en poblaciones de considerable tamaño, con un promedio de 350 casas y mucho más de 500 pobladores. Aunque existen polémicas científicas sobre la descendencia y origen de los lencas, de acuerdo a Rodolfo Barón Castro, son los restos directos herederos de los mayas, que no siguieron el éxodo que dio fin al Antiguo Imperio. A la llegada de los españoles, se encontraban establecidos en el territorio que hoy comprenden las Repúblicas de El Salvador y Honduras."
El área maya comprende lo que en nuestros días son los países de Honduras, Guatemala, El Salvador y México. Los mayas florecieron en estos países en los primeros 15 siglos de la era cristiana. Causas desconocidas hasta hoy, provocaron el abandono y la destrucción de Copány otras ciudades mayas, que en la época de la conquista española ya no eran más que ruinas. Hambre, pestes, guerras internas se han propuesto como las causas del abandono.

Porque decimos que la historia es interpretación.
El conocimiento de la historia es esencial en la vida del hombre, a través de su análisis podemos entender los sucesos del presente que nos toca vivir. La historia es nada menos que la ciencia que hace inteligible el presente que vivimos, la explica a partir de la comprensión de hechos pasados y establece conexiones con diversos aspectos de la realidad actual, para evitar que el pasado nos oprima, y nos condicione, es necesario comprenderlo y es precisamente cuando la estamos interpretando.


Es preocupante la actitud de los jóvenes hoy en día en lo que respecta a la formación histórica: ponen una barrera, no muestran interés en el estudio de la historia y ello se debe a que no logran encontrar una conexión entre los hechos del pasado y su repercusión en el presente, es decir, no logran interpretarla.

I.II El Carácter Cientifico de la Historia

I.II El Carácter Cientifico de la Historia 

La historia es la ciencia que tiene como objeto de estudio el pasado de la humanidad y como método el propio de las ciencias sociales. Se denomina también historia al periodo histórico que transcurre desde la aparición de la escritura hasta la actualidad. Más allá de las acepciones propias de la ciencia histórica, historia en el lenguaje usual es la narración de cualquier suceso, incluso de sucesos imaginarios y de mentiras. En medicina se utiliza el concepto de historia clínica para el registro de datos sanitarios significativos de un paciente, que se remontan hasta su nacimiento o incluso a su herencia genética.

A su vez, llamamos historia al pasado mismo, e, incluso, puede hablarse de una historia natural en que la humanidad no estaba presente (término clásico ya en desuso, que se utilizaba para referirse no sólo a la geología y la paleontología sino también a muchas otras ciencias naturales; las fronteras entre el campo al que se refiere este término y el de la prehistoria y la arqueología son imprecisas, a través de la paleo antropología).

Ese uso del término historia lo hace equivalente a cambio en el tiempo. En ese sentido se contrapone al concepto de filosofía, equivalente a esencia o permanencia (lo que permite hablar de una filosofía natural en textos clásicos y en la actualidad, sobre todo en medios académicos anglosajones, como equivalente a la física).

Para cualquier campo del conocimiento, se puede tener una perspectiva histórica el cambio o bien filosófica -su esencia. De hecho, puede hacerse eso para la historia misma (véase tiempo histórico) y para el tiempo mismo (véase Historia del Tiempo de Stephen Hawking, libro de divulgación sobre cosmología).

Los instintos primarios están relacionados con todas las especies, tanto animales como vegetales, pudiéndoseles denominar también mecanismos de autodefensa. En el ser humano se encuentran presentes y tienen muchísimo influjo en nuestras vidas y en la sociedad, aunque quizá no nos demos cuenta de ello. Podríamos ordenarlos en cuatro categorías; reacciones de supervivencia, instinto de procreación o sexual, búsqueda intelectual y colonización del territorio, e inclinación depredadora de los recursos naturales y frenesí destructor.

Estas agrupaciones encuentran su explicación general en el ámbito de la Biología. Mientras, en lo que concierne a nuestra propia especie, se comprenden con claridad desde la perspectiva antropológica. Si ambas se combinan permiten una visión más completa.
Los factores mencionados, aunque pertenezcan al conjunto, se manifiestan de modo diferente en cada grupo e individuo, incluido en el género. Es así por los componentes genéticos, que son fruto de la herencia cifrada en la memoria celular. De ello se deduce que la naturaleza física, anímica y sicológica de cualquier persona va estar condicionada por ellos.
Por lo tanto, los elementos tradicionales de la Historia no son suficientes para crear un modelo eficaz de interpretación, ni siquiera con la ayuda de las Ciencias Políticas, la Sociología o la Economía. Hace falta recurrir a otras disciplinas, que son principalmente la Biología, la Antropología y sobre todo la Genética.
Los instintos básicos, en su estado primario, podemos denominarlos inconsciencia. Su finalidad última es transformarse en consciencia, que reside potencialmente hasta en la última célula del cuerpo, no sólo en el cerebro. Estos mecanismos entran en relación con el tiempo, o reloj biológico que marca los ritmos de la evolución, tanto progresivos como involutivos. Asimismo, se ven muy influenciados por los condicionantes físicos del espacio y por el resto de organismos vivientes.
En consecuencia, la relación de los instintos con el ámbito espacio-temporal nos da la respuesta exacta del grado de evolución de determinada sociedad. A su vez, cualquier civilización puede comprenderse bajo cuatro parámetros; régimen político, coyuntura religiosa, medios de subsistencia, y fuentes energéticas.
Como resultado de este razonamiento, se podría asegurar que los fenómenos sociales son la manifestación externa de los instintos primarios colectivos, que a su vez son la suma de los individuales. En consecuencia, la verdadera explicación de la Historia no se encuentra en las formas de organización, al menos de forma exclusiva, sino que entran en juego otros componentes vitales.
A la hora de entender la consciencia evolutiva no hay mejor testimonio que el genoma. Es un verdadero registro gráfico, a nivel micro espacial, que contiene una información intrínseca casi ilimitada. Está compuesto de espirales que forman una estructura helicoidal, en la que se contienen los datos de la inteligencia molecular. Es un libro abierto para los científicos y muestra todos los pasos del ser humano desde nuestro pasado más remoto, así como las potencialidades por descubrir.
En síntesis, los componentes de las bases nitrogenadas; A, C, G, T, se repiten en una secuencia concreta, que define la composición de cada individuo, familia o grupo étnico. Al respecto cabe destacar las investigaciones de Spencer Wells sobre genética de poblaciones, en relación con los fenicios, su origen y la posterior herencia en los pueblos actuales mediterráneos.
El estudio está basado en el análisis del ADN presente en los restos óseos del tiempo de la colonización fenicia, así como en la observación del genoma en la sangre de miles de individuos de hoy en día. Sus resultados han llegado a hermanar a algunos musulmanes y cristianos del Líbano, antes en guerra, gracias a la conclusión científica de que ambos entroncan en el mismo origen.
El componente genético en absoluto es estático, sino que muda y evoluciona hacia su propio perfeccionamiento. Guarda siempre toda la información que resulta crucial para la supervivencia y el desarrollo de la especie. Entonces, ¿en función de qué elementos se producen las mutaciones?
Como ya se ha reseñado, están condicionadas por la relación con el ecosistema, donde el oportunismo encaminado a la adaptación es la clave. Pero sólo en nuestro caso los factores instintivos son capaces de crear variables aleatorias de diferentes estructuras sociales, al contrario que en las demás especies. En apariencia este fenómeno sucedería sin solución de continuidad.
Es así por nuestra especial capacidad intelectual o cognitiva, que da prioridad a las formas externas sin percibir la esencia de las mismas. Por el contrario la capacidad cognoscitiva, que reside en nuestro interior como potencialidad, cuando se activa permite el desarrollo de la consciencia individual.
Dado que lo colectivo es la suma de sus elementos, esto nos permitiría alcanzar niveles de organización por encima del lastre histórico de los instintos más negativos.
El hombre y el suceso se rigen por leyes y éstas son el marco en el cual deben planearse todos los problemas que atañen a la historia. Pues la historia asi como el hobre se rige de leyes de las cuales al no regirlas se va creando un problema del cual temos que planear algo para poder arreglarlo y no volver a cometer el mismo error.
El trabajo del historiador
El trabajo del historiador es buscar la verdad, indagar en los hechos históricos, a lo que comenta un historiador: “la historia es la vida pero contada y reflexionada”
El metodo del materialismo historico
En el campo de la historia, Marx y Engels identifican los cambios que ha tenido la sociedad en su proceso de evolución y la relaciones sociales que se han visto transformados a lo largo del proceso histórico, las identifican como un modelo al que equiparan con el materialismo de la historia.
Curiosamente, al escuchar la palabra historia pensamos en dos cosas que no son necesariamente lo mismo: por un lado podemos entender la serie de acontecimientos pasados narrados por alguien (las historias del abuelito) o a una disciplina que se dedica al estudio de esos acontecimientos en forma científica. Nos encontramos entonces con dos propuestas: una historia-acontecimiento y una historia-interpretación.

Al hablar de una historia acontecimiento nos referimos al hecho histórico, un fenómeno que pasó y que es de dominio popular sin mayores expectativas de entendimiento, de todos es conocido que hubo una dictadura de Carías seamos historiadores o no, pero muy pocos saben porqué y que efectos posteriores tuvo en la sociedad hondureña. Sin embargo, cada uno de los participantes habrá dado su versión de los hechos, de sus causas y efectos, dependiendo si estuvo a favor o en contra de la dictadura, en un intento de hacer historia-interpretación. Y a la larga ambos son historia, lo único que las diferencia es la cientificidad involucrada en una de ellas con el fin de dar validez a lo expuesto.

A priori podría parecer simple el hecho de que un acontecimiento es indiscutible porque sucedió y punto; pero su interpretación es sumamente discutible sobre todo por los apasionamientos de los participantes. Aún el acontecimiento puede ser polémico, tal fue el caso de Lempira, el que por muchos años fue un mito hasta demostrarse su existencia documentalmente gracias al tesón del investigador hondureño Mario Felipe Martínez Castillo.

“Historia” como ciencia, puede definirse de forma sencilla como el paso del hombre en sociedad a través del tiempo. Sin embargo, a lo largo de los años, muchas consideraciones han sido tomadas en cuenta como para enriquecer el término y darnos una definición más amplia sobre lo que Herodoto (el primer historiador del mundo) denominó historia, que en latín significa “indagación”. Es cierto que indagamos el pasado, pero no solamente para conocer historias que repetiremos sobre gentes y lugares distantes; Herodoto fue más allá, al intento de comprender los acontecimientos, tratar de explicar el porqué del mismo y como influyó en la sociedad o sociedades involucradas en el fenómeno.

De esta forma encontramos las primeras crónicas que, al llegar a nuestros días, representan valiosos documentos por la forma de presentar los hechos y su intento de explicarlos, por ejemplo las “Crónicas de Judea” de Flavio Josefo, por medio del cuál podemos conocer los hechos de los romanos en tierras judaicas, la destrucción de Jerusalém, el sitio de Masada y la prueba documental de la existencia de Cristo.

Las ciencias evolucionan y es necesaria la abstracción teórica para afinar la definición y encontramos una serie de personajes que teorizan sobre el concepto. Para March Bloch es “la ciencia de los hombres en el tiempo, muy vieja como relato pero muy joven como empresa razonada de análisis”. Como ciencia, su objeto de estudio es el hombre como parte integrante de una comunidad a la que pertenece, caso contrario, es decir, el estudio del hombre como ser individual caería dentro del campo de las biografías, la sociología u otra rama del saber científico.

Esto reafirma el sentido de que la historia tiene un carácter de estudio de la colectividad, del hombre en masa interactuando con el medio que lo rodea en busca de su propio destino. Muchas personas comparten la idea de que la historia es aburrida ya que se trata de fijar mentalmente nombres, fechas y lugares a fin de aprobar una asignatura, pero ello es tan sólo uno de los elementos de la historia: la crónica. La historia vá más allá, busca comprender el pasado para entender el presente y tener elementos de juicio para planificar mejor el futuro.

Quizás por ello es que Childe encuentra en la historia la fuente para resolver con criterio objetivo qué es progreso de una forma científica. Otros autores aportan diversos elementos, Pierre Vilar por ejemplo, habla de comprender el pasado y sus factores sociales para entender el presente; Jean Chesnaux denuncia el carácter conservador de la historia construida por academias y pide una historia al servicio de la revolución social; para Edward H. Carr es la idea que hemos de formarnos sobre la sociedad en la que vivimos, un proceso continuo de interacción entre el historiador y sus hechos, un diálogo sin fin entre presente y pasado; para Miguel Angel Gallo, la historia no es más que el estudio científico de las sociedades a través del tiempo.

Para José Cecilio del Valle, la histotria de una nación era “un curso de ciencias morales, políticas y económicas. Presenta el cuadro del país donde se han unido los hombres para vivir en sociedad; indica su clima, aguas, vientos, producciones, etc…;descubre el origen primitivo del estado, manifiesta las formas de gobierno que han adoptado sucesivamente, la s leyes que han dictado o recibido, y las influencias de sus sitemas físico político en la moralidad, ilustración y riqueza de los pueblos, desarrolla la cadena de sucesos derivados unos de otros y ligados entre sí todos, los progresos o retrocesos, las causas que dan impulso a los primeros o producen los segundos, los tiempos de luz y los tiempos y los días de tinieblas, las épocas de vida y los períodos de muerte. La historia presenta simultáneamente la teoría y la práctica. Es la política en acción, la Crisología obrando, la ciencia moral demostrando sus principios con hechos.”

Un tercer planteamiento aparece en cuanto al término historia: cuando se le usa como teoría. En este caso, se habla de la reflexión más o menos sistemática y rigurosa acerca del sentido, utilidad y limitaciones que posee la historia como ciencia. Tanto la teoria como la historia-interpretación sufren modificaciones a través del tiempo en cuanto a que se van corrigiendo, superando, sufriendo modificaciones todo ello en proporción a la ubicación y acceso a las fuentes de investigación.

Ejemplo de ello, es que hasta hace algún tiempo se creyó que el los mayas en Copán fueron un pueblo pacífico, sin embargo investigaciones recientes han demostrado que ellos también participaron de las guerras que caracterizaron el período clásico mesoamericano. Entre otros factores que inciden en los cambios a la historia podemos señalar:

Ø  Las nuevas exploraciones arqueológicas.
Ø  El avance de las ciencias exactas que al apoyar a la historia son capaces de arrojar nuevos datos, deshechando así las hipotesis anteriores.
Ø  Los cambios filosóficos que, al superar a previas concepciones del mundo, hacen lo mismo con algunas teorías de la historia.
Ø  El desarrollo de nuevas ciencias y su utilidad por la historia.
Ø  Las luchas sociales y políticas que son la materia prima de la historia.

En resumen podemos afirmar que la historia estudia el movimiento del hombre en sociedad a través del tiempo en forma científica abarcando la tríada pasado, presente y futuro; con la premisa de que todo hecho histórico tiene causas y efectos; el objeto de estudio es el hombre, que en cuanto se define como un ser social la historia se avoca al estudio de las sociedades. Toda sociedad que no conoce su historia estará condenada a repetirla. Por eso difundimos en toda forma posible la historia, porque solo así…Honduras avanza.

I.III Las Divisiones de la Historia

I.III Las Divisiones de la Historia
Son 5 los periodos básicos en que se divide la Historia, evidentemente estos periodos son aceptados por los historiadores occidentales para una mejor periodización de la misma.
Los periodos son:
1) Prehistoria: va desde la creación del mundo hasta el invento de la escritura.
2) Edad antigua: las primeras civilizaciones hasta el 476 d.c, que sucedió la caída del imperio romano de occidente.
3) Edad media: desde el 476 d.c hasta 1492 descubrimiento de américa
4) Edad moderna: desde 1492 descubrimiento de américa hasta 1789 con la revolución francesa.
5) Edad contemporanea: desde 1789, revolución francesa hasta nuestros días.
6) La historia del tiempo presente: Estudia el periodo que abarca desde la Segunda Guerra Mundial (en 1945) hasta la actualidad.

Edad Antigua
Desde la invención de la escritura hasta la caída del Imperio Romano de occidente.
Comprende las primeras civilizaciones: Mesopotamia, Egipto, Grecia y Roma.
Se localiza desde el creciente fértil (llanura mesopotámica-próximo oriente) hasta el Mediterráneo oriental (Egipto-Grecia-Roma).


Edad Media
Desde la caída del Imperio Romano de occidente (456 d. C.) hasta el descubrimiento de América (1492 d.C.)
Las principales civilizaciones medievales son la civilización cristiana (Europa) y el Islam, (Península Ibérica, norte de África y próximo oriente).
Castilla, Aragón, Navarra, Reino Franco, califatos Omeya, Cordobés, etc.



Edad Moderna
Desde el descubrimiento de América (1492 d. C.), hasta la revolución francesa (1789 d. C.)
Los elementos culturales europeos más importantes son el espíritu del renacimiento y el despotismo ilustrado.
Es la época de esplendor de la monarquía hispánica (Felipe II) y del absolutismo francés (Luis XIV)
 


Edad Contemporánea
De la Revolución Francesa (1789 d. C.) hasta la actualidad.
Hechos más importantes:
Ø  revoluciones liberales s. XIX.
Ø  revolución industrial.
Ø  Revolución rusa y comunismo.
Ø  S.XX: Guerras mundiales y regímenes democráticos.




Historia del Tiempo Presente
Desde el final de la Segunda Guerra Mundial hasta el momento actual.
Hechos y personajes importantes: 
Ø  División del mundo en dos bloques y guerra fría.
Ø  Descolonización de África y Asia y sus problemas consiguientes (Vietnam, etc.).
Ø  Caída del comunismo.
Ø  El radicalismo islámico.
Ø  Concilio Vaticano II.

La División de Historia (DH) del CIDE, se creó en enero de 2000 como un programa de historia internacional que responde, por un lado, al agrupamiento espontáneo de los historiadores o profesores de otras disciplinas interesados en aplicar un enfoque histórico a sus investigaciones y, por otro, a la estimulante fluidez del diálogo intelectual que dichos investigadores realizan.
La pertinencia de este proyecto se justifica, en principio, con una simple observación, en México, las instituciones de la historia dan prioridad al estudio del pasado nacional, por lo que son raros y aislados los casos de historiadores que se dedican al estudio de otros países y regiones. Tampoco son muy frecuentes los eruditos de historia comparada que insertan a México en el horizonte de su relación con otros espacios. De ahí que exista tanto la necesidad como la oportunidad de contribuir a la apertura de una nueva perspectiva en la historiografía mexicana.
Las dos funciones primordiales de la División de Historia han sido la creación de un espacio de debate, organizado en forma de conferencias, seminarios o congresos, donde se discutan avances de investigación, obras clásicas de la historiografía occidental, temas de actualidad, y la edición de una revista, de enfoque interdisciplinario y con un perfil internacional, que llene, en México, el vacío de una publicación historiográfica actualizada y, a la vez, hospitalaria con las demás ciencias sociales.
No hay un acuerdo universal sobre la periodización de la historia, aunque sí un consenso académico sobre los periodos de la historia de la civilización occidental, basado en los términos acuñados inicialmente por Cristóbal Celarius (Edades Antigua, Media y Moderna), que ponía al mundo clásico grecorromano y su Renacimiento como los hechos determinantes para la división; y que actualmente es de aplicación general. La acusación de eurocentrismo que se hace a tal periodización no impide que sea la más utilizada, por ser la que responde precisamente al desarrollo de los procesos históricos que produjeron el mundo contemporáneo.
En cuanto a la división del tiempo prehistórico en Edad de la Piedra y Edad de los Metales, fue propuesta en 1836 por el arqueólogo danés Christian Jürgensen Thomsen.
La evolución tecnológica presenta dos grandes cesuras en el pasado de la humanidad: la revolución neolítica y la revolución industrial, lo que permite hablar de tres grandes periodos: el carcterizado por la exclusividad de sociedades cazadoras-recolectoras, el preindustrial y el industrial (a veces se emplea el adjetivo postindustrial para el periodo de la historia más reciente).

El problema de cualquier periodización es hacerla coherente en términos sincrónicos y diacrónicos, es decir: que sea válida tanto para el transcurso del tiempo en un único lugar, como para lo que ocurre al mismo tiempo en distintos ámbitos espaciales. Cumplir ambos requisitos resulta difícil cuando los fenómenos que originan el comienzo de un periodo en un lugar (especialmente elPróximo Oriente, Asia central o China) tardan en difundirse o surgir endógenamente en otros lugares, que a su vez pueden estar más o menos próximos y conectados (como Europa Occidentalo el África subsahariana), o más o menos lejanos y desconectados (como América u Oceanía).

Para responder a todo ello, los modelos de periodización incluyen términos intermedios y periodos de solapamiento (yuxtaposición de características distintas) o transición (aparición paulatina de las novedades o características mixtas entre el periodo que empieza y el que termina). La didáctica de la historia se ayuda frecuentemente de diferentes tipos de representación gráfica de la sucesión de hechos y procesos en el tiempo y en el espacio.

División de la historia para su estudio
Los arqueólogos dividen la historia cultural de Mesoamérica en cinco periodos principales: paleoindio (antes de 8000 a.C.), arcaico (8000-1500 a.C.), preclásico o formativo (1500 a.C.-292 d.C.), clásico (292-900 d.C.) y posclásico (900-1527 d.C.).
El periodo paleoindio abarca la época en que Mesoamérica, junto con el resto del continente americano fue ocupado por primera vez por bandas nómadas.
Durante el prolongado periodo arcaico, los grupos mesoamericanos se establecieron en poblados permanentes y desarrollaron la agricultura como su principal medio de subsistencia.
Durante el preclásico se desarrollaron las primeras sociedades complejas, con grandes poblaciones sostenidas por la agricultura extensiva. Estas sociedades se segmentaron en una clase dirigente y otra popular.
El periodo clásico contempla el máximo desarrollo de los primeros estados mesoamericanos dignos de tal calificativo, gobernados por reyes cuyo poder se asentaba sobre religiones oficiales y grandes y poderosos ejércitos. En estos estados se levantaron grandes y populosas ciudades y extensos sistemas comerciales. Durante este periodo se dio una cierta secularización del estado, lo que implicaba que, aunque la religión seguía ocupando un papel importante, no estaba tan mezclada con la política y la economía. Los ejércitos adquirieron importancia en la medida en que protegían las rutas comerciales y servían para adquirir bienes y mano de obra mediante la conquista de otros estados.
*     Paleolítico (etimológicamente Antigua Edad de Piedra, por la piedra tallada). Los hechos más decisivos son los ligados a la evolución humana, en lo físico, y a la evolución cultural primitiva (utilización de herramientas y del fuego y desarrollo de distintos tipos decolaboración y conducta social primitiva; destacadamente el lenguaje).

*     Paleolítico inferior. Primeros modos de talla lítica de instrumentos (Olduvayense o modo y Achelense o modo, asociados a restos fósiles de homínidos: Australopitecus, Homo habilis y Homo ergaster (África sudoriental), Homo erectus (extendido por todo elViejo Continente); Homo antecessor y Homo heidelbergensis (específicos de Europa -yacimiento de Atapuerca).

*     Paleolítico medio. Ligado a cambios en la cultura material (Musteriense o modo y en las especies de homínidos (Hombre de Neanderthal en Europa, Homo sapiens arcaico en África Hombres de Kibish), desde hace 130.000 años hasta hace 35.000 años aproximadamente.

*     Paleolítico superior. Ligado a la cultura material asociada al Homo sapiens moderno:el modo  (Auriñaciense, Gravetiense,Solutrense, Magdaleniense en Europa, Clovis y Monte Verde en América, donde por primera vez aparecen homínidos); desde hace 35.000 años hasta hace 10.000 años aproximadamente. Ya no hay cambios significativos para la paleoantropología en el registro fósil; las variaciones entre distintos grupos son mucho más sutiles: las estudiadas tradicionalmente por la antropología física y que se conocían como razas humanas, y que la moderna genética de poblaciones estudia con renovadas metodologías (genética molecular). Junto con la paleo-lingüística pretende reconstruir las migraciones primitivas.

*     Mesolítico/Epipaleolítico/Protoneolítico. Periodo de transición, ligado a los cambios que produjo el fin de la última glaciación. Desde elX milenio a. C. hasta el VIII milenio a. C., aproximadamente. En las zonas en las que significó una transición hacia el neolítico se denomina mesolítico, mientras que en el resto, en las que sólo significa una fase de continuación del paleolítico, se denominaepipaleolítico.

*     Neolítico (etimológicamente "nueva Edad de Piedra", por la piedra pulimentada: modo. Del VIII milenio a. C. al IV milenio a. C.aproximadamente. Su inicio en cada zona está ligado al desarrollo de la denominada Revolución Neolítica: sustitución de la economía depredadora (caza, pesca y recolección) por la economía productora (agricultura y ganadería), lo que intensificó extraordinariamente la densidad de población (de crecimiento limitado -régimen demográfico antiguo-) y el impacto en el medio ambiente.

*     Edad de los Metales. Desde el IV milenio a. C. (o más tarde, según la zona), que aunque es una época ya histórica en el Próximo Oriente Antiguo, es aún prehistórica en la mayor parte del mundo. Innovaciones tecnológicas de difusión paulatina (metalurgia, rueda,arado, vela). Algunas aldeas se amurallan y aumentan de tamaño hasta transformarse en ciudades.).

*     Edad del Bronce (II milenio a. C. aproximadamente, en Europa Occidental).


*     Edad del Hierro (I milenio a. C. aproximadamente, en Europa Occidental, hasta la romanización).